El Norte de Castilla
Real Valladolid

Rubi: «Quiero que llegue un nuevo portero lo antes posible»

vídeo

Rubi en la rueda de prensa / Rodrigo Ucero

  • El técnico blanquvioleta espera que la portería esté cubierta «con el nivel que daba Mariño»

La marcha unilateral de Diego Mariño al Levante ha dejado al Real Valladolid con un problema en la demarcación de guardameta. Joan Francesc Ferrer 'Rubi' no lo oculta: «Nos trastoca porque era un portero con el que contábamos muchísimo. Creíamos en él. Pero, a rey muerto, rey puesto. Trabajamos al máximo para tener un portero de garantías, porque, eso sí, la portería del Real Valladolid tiene que estar cubierta, como mínimo, con el nivel que nos daba Mariño», ha señalado el entrenador blanquivioleta este viernes.

El guardameta internacional venezolano Dani Hernández no entra en los planes iniciales del cuerpo técnico, aunque Rubi ha reconocido que tal vez tenga que jugar durante los primeros amistosos de pretemporada. «He pedido tiempo para que podamos conocerlo mejor y que haya una valoración más clara, aunque su situación, a día de hoy, no es fácil que cambie en este sentido. Nosotros analizaremos en base a los entrenamientos y es posible que la semana que viene tenga que participar en los dos primeros partidos amistosos, o él o Julio, si no llega nadie antes».

El portero canterano Julio Iricibar «disputará la titularidad en el Promesas». «Si está haciendo la pretemporada con el primer equipo es porque pensamos que es un portero muy válido y, si se lo gana, jugará en el filial y será nuestro tercer portero».

El entrenador ha apuntado que el Real Valladolid «maneja una lista de cuatro porteros» para suplir a Mariño. La idea de la dirección deportiva es incorporar dos. «A alguno le puedo haber propuesto yo», ha admitido Rubi. «Si viene uno que ha propuesto la dirección deportiva, también será de un nivel alto. No lo tengo que imponer yo. Cuanto antes venga, mejor. Llevamos 12 sesiones de entrenamiento y en nueve hemos incidido en trabajos defensivos. Necesitamos que el portero venga lo antes posible para que asimile esos trabajos».

Rubi ha señalado que los futbolistas «están sufriendo» los rigores de los entrenamientos. «Todas las mañanas hacemos trabajos físicos. Los jugadores asimilan las cargas y aparecen situaciones típicas de pretemporada: sobrecargas, ampollas... Pero estamos en un punto adecuado después de una semana con muchísimos entrenamientos en los que no ha habido ninguna situación negativa».

El técnico tiene «fe» en la próxima llegada de «dos o tres jugadores» y que no salgan futbolistas imprescindibles en su esquema. «Ya dije que una de las bases del equipo pasaba por mantener la plantilla que teníamos, los jugadores con los que contábamos, y esperemos que no haya más sorpresas».

Rubi se muestra «muy, muy contento» con el trabajo de los canteranos que efectúan la pretemporada con el primer equipo. «La primera semana es difícil. Nosotros somos un equipo que da muchos contenidos en los entrenamientos, muchas cosas que obligan a pensar y encima con una gran carga física. Una vez que asimilen esta parte, saldrá el verdadero Anuar, el verdadero Iván, el verdadero Jorge... Todos. Noto que dan pasos importantes. Cuando ves a un jugador del filial entrenar igual que los otros es que se está poniendo al mismo nivel».

Rubi considera que a la plantilla le faltan efectivos en casi todas las posiciones. «Un lateral izquierdo, jugadores de banda ofensivos, alguno más de medio campo, y algún delantero más. Nos falta de todo. Quizá donde vamos mejor es en el tema de los centrales».

Próximamente, llegará Chus Herrero. «No escondemos que es un jugador que vamos a intentar cerrar. Nuestra intención es que viaje lo antes posible. Es un jugador que va a sorprender. Nos va a dar muchísima polivalencia. Puede jugar en cualquiera de las cuatro posiciones de la defensa con total garantía».

Rubi ha explicado la decisión de cerrar la mayoría de los entrenamientos al público. «Me gustaría que se fuera un poco comprensivo en este tema. Nosotros intentamos poner siempre alguna puerta abierta para que el aficionado pueda disfrutar y subir algún día. Sobre todo lo hacemos porque damos mucho contenido a los jugadores, les obligamos a tener mucha concentración. Ese punto de intimidad, de tranquilidad, incluso para los nuevos, nos viene muy bien. No es por hacer la puñeta a nadie».