El Norte de Castilla
Real Valladolid

PUERTA 17

CONFIRMACIÓN Y CALIDAD

Decía la semana que empezaba la Liga que agosto es siempre el mes de la ilusión, de energías renovadas y sinónimo de proyecto ilusionante en forma de permanencia o ascenso en función de la categoría y objetivo. Al entrenador casi siempre se le da un margen de maniobra y de confianza hasta que empieza a rodar el balón y empiezan las primeras sensaciones.

De momento, quizá el mayor pero que se le puede poner al equipo es su falta de constancia. En casi todos los partidos, incluido contra un flojo Racing de Santander, hemos desconectado durante una parte del partido. Pasó la segunda parte contra el Mallorca, la primera contra el Lugo, los últimos 30 minutos contra el Racing y también la segunda parte en Santo Domingo la pasada jornada frente al Alcorcón.

También es verdad que es muy complicado ver a un equipo durante los noventa minutos a un nivel muy alto. Por concentración y porque delante también juega el equipo rival. Aun así, creo que el objetivo de Rubi debe ser de dotar de esa personalidad al equipo que le permita dominar todos los tiempos del partido, incluido cuando se sufre sin balón.

Por otro lado, parece importante seguir vivo en Copa del Rey para mantener enchufada al resto de la plantilla aunque por el momento solo Chica, Rueda, Valiente, Leão y Óscar parecen fijos. Los minutos de Jorge en Liga y Copa más los de Carmona en Copa deben tener continuidad para tenerles preparados ante cualquier posible eventualidad.

El mes de septiembre está siendo el de la confirmación. La plantilla quizá sea corta en número pero es más larga a nivel cualitativo respecto a años anteriores, hay alternativas y el míster deberá aprovecharlo. La opción de juntar en un once a Roger, y los dos Óscar parece una buena fórmula porque cuando los buenos se encuentran suelen ocurrir cosas como ocurrió en el gol frente al Alcorcón.

Ganar fuera de casa casi un año después debe dar otro empujoncito de moral para el equipo y olvidar dinámicas perdedoras y excusas. Desterrados miedos del pasado, y con la confianza de los nueve puntos sobre doce posibles, el equipo debe buscar dar un paso más porque la Segunda es muy larga y vendrán tiempos peores.