El juez que instruye el denominado 'caso Osasuna' estima que hay indicios de que, desde el club navarro, se destinaron 400.000 euros al Betis para que ganara al Valladolid la temporada pasada 2013-14. El equipo bético ya estaba matemáticamente descendido, pero remontó en tres ocasiones al Real Valladolid para acabar ganando el partido por 4-3, lo que implicó el descenso del conjunto vallisoletano a Segunda División. Posteriormente, en el último partido de liga, el Osasuna pagó 250.000 euros al Betis por dejarse ganar en el estadio navarro, lo que así ocurrió después de la polémica de las vallas caídas y que obligó a toda la categoría a retrasar el inicio de la segunda parte en todos los campos.
En total, el juez cree que se destinaron 900.000 euros a amañar, al menos, tres partidos. Se trataría de 250.000 euros entregados presuntamente al Espanyol por un empate y 650.000 al Betis por dos partidos (400.000 por ganar al Valladolid y 250.000 por dejarse ganar por Osasuna).
El magistrado, que ha ordenado el levantamiento parcial del secreto del sumario, sigue investigando otros partidos cuyo resultado también fue presuntamente alterado por Osasuna, así como el destino de 2,4 millones de euros extraídos en metálico de las cuentas del club.