El Norte de Castilla
Real Valladolid

Braulio Vázquez, Director deportivo del Real Valladolid

De oficio, descubridor

Braulio Vázquez, al teléfono en el vestíbulo del balneario de Mondariz.
Braulio Vázquez, al teléfono en el vestíbulo del balneario de Mondariz. / A. Vidal
  • No quiere –ni puede, por motivos presupuestarios– fichar estrellas. Así se ahorra la plusvalía de la fama. Prefiere que sus apuestas ‘exploten’ en Zorrilla, como Roger

Para salir airoso de un mercado en el que no cuenta con el mayor presupuesto de la categoría, Braulio Vázquez apuesta por fichajes que destapen su calidad en Zorrilla, cuando hayan firmado por el Real Valladolid, para ahorrarse la plusvalía de un nombre o una fama que no siempre responden a las expectativas. Ni al dinero desembolsado.

El miércoles se desplazó a Mondariz, donde presenció el partido-entrenamiento frente al Celta B. Ayer su oficina era el vestíbulo del balneario o cualquier lugar en el que pudiera atender llamadas con cierta discreción y tranquilidad ambiental, algo fácil de conseguir en la sede de la concentración. Apenas dejó el teléfono en toda la mañana para despachar con Gaizka Garitano, tras la sesión de recuperación el A Lagoa, y para atender a los periodistas. Con el presidente, Carlos Suárez, había despachado la noche anterior, tras el partido contra el Celta B.

Braulio Vázquez descartó ayer que se sumen nuevos fichajes a los jugadores concentrados en Mondariz, pero advierte de que la próxima semana llegarán, al menos, dos nuevos jugadores a los Anexos.

El director deportivo no se puede permitir generalizar con los recursos, como a veces hace el presidente del club, porque el éxito de sus gestiones depende a veces de una concreción milimétrica de las ofertas. Cuando habla del presupuesto destinado a los fichajes, que Suárez, pendiente aún de la salida de algunos jugadores, estima que puede ascender a 5 o 6 millones de euros, el director deportivo precisa: «No es lo mismo un millón más o menos. No me voy a quejar, pero hay equipos en Segunda División que están por encima de nosotros a nivel presupuestario. Almería, Zaragoza y Oviedo creo que tienen más presupuesto. Aunque nosotros no nos podemos quejar, tenemos más que la mayoría».

–Desvelar las cartas es malo en este juego de los fichajes...

–Sí, evidentemente.

–Pero, ¿cree que va a conseguir lo que pretende?

–Algunas cosas están en vías de... Algunas sí, seguro, y otras no lo sé. Aunque solo quedan tres semanas para competir, falta todavía un mes de mercado, que es muchísimo.

¿El Real Valladolid va a tener un ‘nueve’ fetén?

–Fetén... La gente no conocía a Roger el año pasado y, sin embargo, pronto quedó encantada con su trabajo en el campo y sus posibilidades. Es un poco lo mismo. Queremos traer jugadores que rindan, no previamente, sino que lo demuestren en el campo. A Roger no lo conocían el año pasado y a las dos semanas la gente estaba encantada con él. Los ‘nueves’ que traigamos queremos que generen expectativas en el campo, no antes.

–¿Porque se lo podrían quitar?

–Sí, exacto.

–Con Gaizka Garitano, ¿hay comunidad de intereses?

–Hay jugadores que conocemos los dos, otros que conozco yo y otros él más que yo. Al final es llegar a un acuerdo. Él me dice las características de los jugadores que quiere e intentamos llegar a una entente. Aunque siempre hay alguno al que no podemos ni llegar, por mucho que nos guste a los dos. Pero lo cierto es que tenemos que ir de la mano. Es como todo. Yo he trabajado con Unai, con Valverde, con Rubi el año pasado. Al final, lo que haces es intercambiar opiniones. Son gente de fútbol y al final sí que es fácil.

–Pero, al final, hoy están aquí y mañana en otro equipo. ¿Les interesa a los dos el Real Valladolid?

–Claro que sí. Yo estoy muy a gusto en Valladolid. La gente respeta mi trabajo y la afición, incluso, creo que está contenta con lo que hicimos el año pasado

–Es gallego, trabaja en Valladolid y tiene a la familia en Valencia. ¿Le cuesta sobrellevar esta especie de esquizofrenia?

–En absoluto. Soy gallego, sí, y mi familia está en Valencia, pero como el mundo del fútbol es muy cambiante no puedo estar llevándolos de un lado para otro. Además, tengo un hijo que es buen futbolista, joven todavía, y no quiero que, como el resto de mi familia, esté cambiando constantemente de domicilio. Pero al final yo soy un gallego que está muy a gusto en Valladolid. Nos tratan bien y estoy muy a gusto, intentando responder a las expectativas que han puesto en mi trabajo.

–Cuando se inició la pretemporada se habló de veinte fichas para el primer equipo. Luego se sugirió que podría haber más. ¿Lo dejan en veinte, al fin?

–Veinte, probablemente veinte, pero hay jugadores como Caye Quintana, Renzo, Ángel o Royo, del segundo equipo, que están cumpliendo muy bien y están dando un paso adelante. No digo que ya estén para ser actores principales, pero sí para echar una mano.

–La afición siempre agradece que saquen jugadores de la cantera.

–Lo sabemos, sí.

–¿Marcelo Silva seguirá durmiendo solo?

–¿¿??

–Son impares –los jugadores concentrados en Mondariz suman 25– y es el único que no comparte habitación, por lo que se suponía que si llegaba uno nuevo al balneario se instalaría con él.

–A estas alturas de la semana no creo que, incluso si hubiera un fichaje ahora, se sumara a la concentración. No creo que Marcelo tenga que compartir habitación.

–Si van a ser veinte fichas y ahora tienen 14 en el primer equipo, aún tiene seis fichajes pendientes.

–Que esté la gente tranquila, que la semana que viene llegarán nuevos jugadores. No puedo decir cuándo porque hay negociaciones en curso, pero seguro que la próxima semana vendrán, mínimo, dos jugadores.

Braulio Vázquez mantiene su hábito de no dar por hecho aquello que no esté firmado. Pero transmite seguridad cuando augura nuevas incorporaciones.