«El arbitraje me ha parecido bochornoso, vergonzoso y todos los calificativos que se te puedan ocurrir y creo que me quedo corto. No entiendo nada. La expulsión de Juan Villar me parece ridícula, es una vergüenza. No he visto nada igual».
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Braulio Vázquez no ahorró ayer reproches a la actuación de los árbitros. Incluso sugirió la existencia de un complot contra el Pucela. «Hemos hecho 18 faltas y hemos visto 7 amarillas y dos rojas. El penalti, no sé si es o no, puede serlo, ¿pero roja? La segunda amarilla a Juan Villar… hasta los jugadores del Numancia estaban sorprendidos. Me dicen por teléfonos conocidos míos, que son objetivos, no hinchas del Valladolid, que ha sido un robo y un atraco. El partido estaba totalmente controlado. Pienso que si el árbitro tiene que expulsar a siete más, lo habría hecho. No he visto nada igual nunca. Uno se puede equivocar, pero tanto… No creo que haya sido por favorecer al Numancia, pienso que hay una persecución contra el Valladolid.
Y van tres penaltis
El Portero Kepa Arrizabalaga manifestó su malestar al abandonar el vestuario: «Nos vamos con la mala sensación de ver cómo teníamos el partido con 0-2, con uno menos, controlado a falta de media hora, sin sufrir… El penalti y la expulsión nos han hecho mucho daño. Aunque hemos aguantado con 9, nos quedamos con mala sensación. En el vestuario estamos fastidiados. No voy a valorar la actuación arbitral, pero llevamos cuatro expulsiones y tres penaltis en contra en cinco partidos.
Sensación de tristeza
Moyano también manifestó su abatimiento por el desarrollo de un encuentro que el Pucela tenía controlado. «Al final tenemos que dar hasta las gracias por haber terminado con algún jugador más y por haber salvado el punto, pero con la sensación de tristeza de que incluso con un hombre menos y con 0-2 no estábamos sufriendo ningún contratiempo, con el partido controlado. Me quedo con la actitud del equipo, que ha sabido salvar ese punto en una situación muy difícil».