El Promesas de Rubén Albés consiguió ganar al Pontevedra y puso fin a la racha de cinco partidos sin conocer la victoria. Los dos tantos de Higinio desde el punto penalti sirvieron al filial blanquivioleta para amarrar los tres puntos y obtener un refuerzo moral, después de ver que el buen fútbol que desplegaban no se veía correspondido con los resultados.
El Pontevedra sorprendió a los de Rubén Albés al plantear una defensa de cinco hombres en el inicio del partido, pero esto solo hizo que beneficiar al filial pucelano, que se mostró muy superior durante todo el primer tiempo. El dominio y las ocasiones fueron del equipo blanquivioleta, en el que había que destacar la presencia de Anuar en el lateral derecho.
La primera gran ocasión del partido la tuvo el Promesas en una contra que finalizó en las botas de Mayoral, cuyo disparo fue atajado por el meta visitante Edu Sousa, que cuajó un gran encuentro.
Casi acto seguido en otra contra, el filial pudo adelantarse de nuevo. Renzo, Sinistierra e Higinio se entendieron a la perfección, pero el ariete no pudo definir. En la siguiente jugada el delantero si acertaría a adelantar los suyos desde el punto de penalti, después de que el colegiado decretara la pena máxima en una entrada sobre un jugador blanquivioleta.
El gol despertó al Pontevedra y al poco Jacobo Trigo, a la salida de un saque de esquina, empató, ayudado por Dani Hernández, que no salió bien, y la defensa, que no acertó a despejar y dejó que el centrocampista rematara a placer en el segundo palo.
Antes del descanso, el Promesas, con Higinio de protagonista tuvo dos claras ocasiones para adelantarse de nuevo. Primero con un remate de cabeza que se marchó alto y después con un remate a la manos de Edu Sousa. A pesar de haber sido muy superior, el filial del Real Valladolid se fue a vestuarios con el empate a uno.
El segundo tiempo fue mucho más igualado, incluso pudo haberle dado la vuelta al marcador el Pontevedra en dos mano a mano muy claros ante Dani Hernández. El joven cancerbero ganó la partida de manera brillante a Jacobo Trigo y Barco envió su disparo demasiado cruzado.
Apenas hubo ocasiones durante la segunda parte, el juego se paró mucho y tan solo desde el punto de penalti pudo anotar el Promesas, para sellar su triunfo a falta de 15 minutos. Higinio volvió a transformar desde los 11 metros.
En la siguiente jugada, Trigo anotó con la cabeza. Pudo ser el empate, pero el colegiado señaló posición antirreglamentaria del centrocampista.
El marcador ya no se movió y el Promesas consiguió un triunfo muy importante para la confianza de los jóvenes jugadores, que pelearon de principio a fin por cerrar la mala racha que llevaban.
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