El Real Valladolid B perdió en los Anexos al Estadio José Zorrilla ante el Celta B, uno de los mejores equipos que han pasado por este campo, pero que no hizo méritos para llevarse el partido ante los pucelanos, que dominaron con buen fútbol a su rival durante muchos minutos y claudicó en dos acciones a balón parado.
Durante la primera mitad ambos filiales midieron sus fuerzas, aunque era el Promesas quien pareciá tener más dominio. Ninguno de los dos equipos hacían feos al balón, pero los de Rubén Albés eran los que mejor combinaban y llegaban con peligro al área rival. Los jugadores del filial celeste solo conseguían frenar a los pucelanos a base de faltas. Solo en el primer tiempo, que se cerró con una falta de Samanes que detuvo Néstor, el Celta B vio cinco amarillas.
Nada más salir de vestuarios, el Promesas gozó de dos buenas ocasiones para adelantarse en el marcador y hacer justicia a lo que se veía sobre el césped artificial de los Anexos, pero en un saque de esquina el recién incorporado Juan Hernández remachaba de cabeza un balón que se alojo en la portería de Tanis, quien a pesar de su estirada no pudo evitar el gol del Celta.
A balón parado el conjunto gallego se conseguía adelantar sin hacer demasiados méritos para ello. A raíz del gol y con el Promesas volcado en conseguir el empate, los celestes pudieron matar el partido. Primero con balón que saca Calero a Borja Iglesias bajo palos y después Tanis evito en un remate de Mera el 0-2.
El Celta B trató de dormir el partido con posesiones largas de balón y pérdidas de tiempo, pero el conjunto dirigido por Rubén Albés no iba dejarse ganar en su campo tan fácilmente.
Cuando todo parecía visto para sentencia con el 0-1, en los últimos minutos el marcador enloqueció. En el 92, Higinio aprovechó un centro de Iván Martín desde la banda izquierda para fusilar al arquero Néstor con un gran remate a quemarropa y poner un empate que el filial se había ganado a pulso. Pero en la última jugada del partido, el Celta B ejecutó al Promesas: falta central colgada al corazón del área, donde tres jugadores vigueses entraban libres de marca, entre ellos el pichichi celeste, Borja Iglesias, que finalmente cabeceó picado para dar la victoria a su equipo. Gol y final del encuentro.
Con este resultado, el Promesas cosechó su derrota consecutiva y también la segunda de la temporada como local. La victoria del Pontevedra in extremis en Villaviciosa (0-1), deja Promesas a seis puntos del conjunto gallego antes de la visita del filial blanquivioleta a Pasarón la próxima jornada. Mientras que el Celta B se coloca segundo en la tabla a expensas de lo que haga el Racing de Santander en visita al campo del Tudelano.
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