El Norte de Castilla
Real Valladolid

LEJOS DEL ÁREA

Buenos mimbres

El Real Valladolid volvía el pasado domingo a visitar Santo Domingo, lugar de gran recuerdo para los pucelanos tras el último ascenso a Primera: el dolorido hombro de Sisi, el olfato goleador de Guerra...Son momentos que siempre quedarán en nuestra memoria. Pero la vida sigue y afrontamos otro año más en Segunda, lugar donde solo con recuerdos y el peso de un escudo no se gana. Es por ello que hay que celebrar que este Pucela de Rubi sepa también tirar de oficio para llevarse los tres puntos. Ya en Gijón, muchos de los teóricos suplentes dejaron cosas interesantes y una muestra importante de compromiso; buenas sensaciones que continuaron, pese a no poder verlo por la tele, en Alcorcón.

Es pronto para sacar conclusiones, pero el Real Valladolid tiene un grupo de jugadores, algo corto, pero muy interesante; piezas que parecen acoplarse y complementarse como un equipo. Este año, al menos a estas alturas, nadie parece desentonar. No tenemos que lidiar con alemanes díscolos, albano-kosovares individualistas o futbolistas que se creen más de lo que son. En la portería, Dani lucha con trabajo y buenas actuaciones para no ser suplente, mientras que Varas es un lujo para Segunda si comienza a coger seguridad y forma; además tenemos al canterano Julio, un joven con ganas y dispuesto a ayudar.

En defensa, los veteranos Peña, Valiente y Rueda, junto con Chica, deberán seguir siendo parte importante del Pucela, pero no deben despistarse. Los nuevos fichajes como Samuel o Herrero son hombres a tener en cuenta que ya han mostrado que pueden aportar. Además, tenemos al canterano Carmona y a Mojica y Bergdich, jugadores que tienden al desorden, pero con proyección en ataque.

En el centro del campo Rubio no estará solo: Leao parece fijo y Timor y Sastre darán descanso y alternativas al riojano. Para el final queda la guinda del pastel. Con Óscar, Omar y Jeffrén recuperados para la causa, vamos a disfrutar este año de la conexión Díaz-Roger. El valenciano tiene maneras para hacer olvidar a Javi Guerra.

En el banquillo, a falta de otro delantero puro, espera gente como Jorge o Alfaro, jugadores interesantes y con calidad.

Como ven, al menos sobre el papel, hay mimbres para conseguir nuestro objetivo, un proyecto para el que no ha hecho falta conformar una ONU dentro del vestuario. La labor de Braulio y Rubi, con trabajo y paciencia, debería acabar dando sabrosos frutos.